Me gusta hacer animalitos con el papel. Llamo a esto papiroplexia. Un juego lento y hermoso. Ayer o hace un siglo, quizá esta mañana, hice un animalito con un papel azul y otro blanco. Era un animalito porque tenía cuatro patas, un cuerpo y una cabeza. No sé qué clase. Fui ahí al lado y cuando volví le vi comiéndose el desayuno. No le recriminé, por el contrario le traje más leche y se la puse en el plato por saber si me aceptaba. Se acercó, y bebió de la leche, con unos chasquiditos menudos y satisfechos. Viéndole, pensé que debería hacer más animalitos de papel: muchos.
Pero luego, quizá ayer o hace un rato, quizá el año pasado, se me acabaron las cuartillas. Necesitaba seguir escribiendo. Deshice el animalito y escribí en él. Fue muy doloroso.
(Alberto Omar Walls)
1 desvaríos:
deberías haber salido a comprar más, pobre animalito...
muy bueno el cuento de este señor..besitos
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